
El miércoles, ADP informó que la contratación en empresas privadas aumentó inesperadamente en abril, lo que refleja las expectativas de un futuro enfriamiento del mercado laboral.
Las nóminas privadas aumentaron en 296 000 en el mes, por encima de la tasa decreciente de 142 000 del mes anterior y muy por encima de la estimación del Dow Jones de 133 000. La ganancia fue el aumento mensual más alto desde julio de 2022.
El aumento se produce a pesar de los esfuerzos de la Reserva Federal para frenar el crecimiento económico y, en particular, para domar un mercado laboral fuerte, que agregó más de 800.000 puestos de trabajo este año, según el recuento de ADP. El desequilibrio entre la demanda y la oferta en el mercado laboral ha llevado a fuertes ganancias salariales que se reflejan en presiones inflacionarias persistentes.
Una señal positiva para la Fed es que la nómina anual ha aumentado un 6,7 % durante el último año, una desaceleración de las ganancias que han estado constantemente por encima del 7 %.
“La desaceleración en el crecimiento de los salarios da la indicación más clara de lo que está sucediendo en el mercado laboral en este momento”, dijo Nella Richardson, economista jefe de ADP. “Los empleadores están contratando agresivamente mientras se aferran a las ganancias salariales mientras los trabajadores están contratando al margen”.
El informe de la compañía es un precursor del conteo de nóminas no agrícolas que el Departamento de Trabajo está observando de cerca el viernes. Los economistas encuestados por Dow Jones esperan que los datos muestren un aumento de 180.000 después de los 236.000 de marzo. Los dos informes a menudo difieren, a veces por amplios márgenes.
Según ADP, el crecimiento laboral más rápido en abril se produjo en el sector del ocio y la hostelería con aumentos de 154K, seguido de los servicios de educación y salud (69K) y la construcción (53K). Otros sectores que registraron aumentos significativos fueron recursos naturales y minería, con 52.000, y comercio, transporte y servicios públicos, que sumó 32.000.
El sector financiero, que sufrió las entradas de depósitos que provocaron el cierre de tres bancos medianos, perdió 28.000 puestos de trabajo durante el mes. La fabricación también se vio afectada, con 38.000 puestos de trabajo menos, ya que el sector ha estado en contracción durante los últimos seis meses.
Las ganancias de empleo se distribuyeron de manera bastante uniforme entre el tamaño de la empresa, con empresas que emplean a menos de 500 empleados contribuyendo con 243,000 en total.